Por medio de ella se puede restaurar la salud, corrigiendo deficiencias con base en la bioquímica individual. Se usan sustancias naturales presentes en el cuerpo como las vitaminas, minerales, aminoácidos y ácidos grasos esenciales en la cantidad “exacta” de la sustancia administrada a cada célula del organismo para que mantenga o recupere su bienestar.
Tiene como una de sus bases fundamentales la rehabilitación celular a través de su restablecimiento químico interno, mismo que se lleva a cabo gracias a los nutrientes que cotidianamente consume el ser humano pero que para fines de la restauración de la salud serán administrados en las dosis adecuadas y personalizadas.
Por otro lado, existen decenas de sustancias que el organismo humano no produce y que necesita, los alimentos que consumimos diariamente carecen de muchos nutrientes debido al uso excesivo de fertilizantes e insecticidas. Es por eso que es necesario tomarlos a través de suplementos alimenticios ya que si no los consumimos diariamente, el organismo los tomará de las reservas que hay en los huesos, nervios y órganos internos, ocasionando una degeneración celular y así la enfermedad.
Son de un precio muy accesible, tomando en cuenta los miles de pesos que una persona gasta en restaurar su salud.
La medicina regenerativa se denomina a todas aquellas terapias que se emplean para la regeneración de los tejidos y la mejora de las estructuras del organismo. Puede emplear cualquier terapia que permita una mejora de las estructuras del organismo; desde la implantación de ácidos hialurónicos que mejoren la hidratación de los tejidos y la formación de colágeno, el uso de plasma rico en plaquetas (PRP) que mejora la vascularización de la zona y la movilización de células regeneradoras al tejido afectado, hasta el uso de células madre para regenerar los tejidos con la formación de células diferenciadas del mismo.
Las células madre son células primogénitas de los tejidos, es decir, células que son capaces de reproducir cualquier tejido donde se coloquen. Esto permite, no solo mejorar la vascularización y promover el sistema de regeneración del propio organismo, sino forzar el mismo añadiendo células que lo produzcan.
La curación de enfermedades sin tratamiento, la regeneración de tejidos dañados por la vejez o por un traumatismo, la creación de órganos listos para trasplante o la solución a trastornos genéticos son algunos de los objetivos de la medicina regenerativa, una de las armas médicas del futuro y un campo de estudio real en el presente.